Últimamente escasean las palabras…
Mi problema es la felicidad, resultó ser tremenda pudorosa, me ha quitado las palabras para que no la pueda desnudar sobre la hoja.
En cambio, si estuviera triste… ¡Ja! Sería muy distinto.
Mi tristeza es tan impúdica que se humedece con cada letra en el papel.
martes
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